El paradigma de la Estupidez, viene en diversos esquemas, y lamentablemente al alcance de la mano, presto para seducir al de más endeble carácter, se puede presentar en aquellos que se aluden ser eruditos, aunque uno crea que la estupidez se basa en la ignorancia, pues a la verdad, proviene de aquellos que carecen de principios y no precisamente tiene que ver con la educación o grado escolar, y el estatus social; como decía, ésta peculiar característica es obvia tan solo al escuchar a la persona que la posee, por favor! es una lástima escuchar decir una sarta de estupideces en tan pocos segundos a quien se le consideraba ser un personaje importante, culto y educado, o qué decepción cuando crees que esa mujer tan bella, elegante o de gran presencia, abre su boca para oír las más huecas palabras que pueda haber; además admitir que hemos llegado a ser parte de las estupideces de otros en alguna encomienda que se nos haya requerido, claro, es un acto involuntario por nuestra parte, pero hay que reflexionar en cuanto volver a caer en estas barbaridades. Sin embargo...quién no se ha comportado estúpidamente alguna vez en su vida?, por más que queramos borrar ese momento, por alguna razón recurre a nuestra memoria. Por ello, estar atentos a los episodios estúpidos de otros nos debe poner en alerta, estar ajenos en la participación y celebración de los mismos, sin dejar pasar por desapercibido que, gracias a esas estupideces, en algún momento hemos salido beneficiados.
RMM ***
RMM ***
No hay comentarios:
Publicar un comentario